Apertura del año judicial: Gutiérrez destacó la “colaboración” entre poderes “sin invadir” a los otros

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El presidente de la Corte destacó que la Justicia controla la legalidad de los actos de gobierno, pero no las políticas. Desestimó la “confrontación” entre poderes y resaltó la “inamovilidad” de los jueces.

El presidente de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, Rafael Gutiérrez, destacó el rol de la Justicia en el control de la legalidad de los actos de gobierno, aunque no de su “acierto, oportunidad o conveniencia”. Y como correlato de ello, aludió a la “inamovilidad” de los magistrados mientras conserven su idoneidad, y a los mecanismos previstos por la Constitución para resolver la cuestión cuando así no fuera.

La mención adquirió especial relevancia en el marco de la voluntad expresada por el gobierno de la provincia en avanzar en la renovación de la integración del Alto Tribunal. En ese marco, al inaugurar el año judicial, Gutiérrez puso el énfasis en la “separación de funciones” de los poderes, en un plano de colaboración.

El acto contó con la presencia del gobernador Maximiliano Pullaro y la vice Gisela Scaglia, la defensora general de la Nación Stella Maris Martínez, el presidente provisional del Senado Felipe Michlig, la presidenta de la Cámara de Diputados Clara García, el intendente de Santa Fe Juan Pablo Poletti, la presidenta de la Junta de Cortes provinciales, Maria del Carmen Battaini, junto a miembros de superiores tribunales de distintas provincias. También diversas autoridades de la provincia, del Poder Judicial, de la sociedad civil y del ámbito académico. Y entre los presentes, tres ex gobernadores de la provincia: Víctor Reviglio, Antonio Bonfatti y Omar Perotti, estos últimos dos actualmente diputados provinciales.

Contextos

Gutiérrez comenzó su discurso con una mención especial al Día de la Mujer, “que se ha constituido en un punto de inflexión para nuestra historia moderna, que nos convoca año tras año a luchar por una mayor igualdad de oportunidades para todas las infancias, mujeres y diversidades”.

A continuación, enmarcó su discurso en la cuestión de la división constitucional de poderes, “clave del funcionamiento del Estado moderno”, que por influjo de la complejización del entramado social e institucional devino en una “más prudente y realista ‘separación de funciones’, en la cual no todo se piensa en términos de diferenciación, ya que aparecen relaciones de colaboración entre los órganos; aparecen nuevas modalidades de control; e incluso hay nuevos poderes -o, al menos, órganos extra-poder”, describió.

Para Gutiérrez, es síntoma de “buena salud” institucional la existencia de canales de comunicación entre los distintos sectores del Estado, “como rasgo de madurez política, tanto como de seguridad y previsibilidad”.

En una alusión al contexto socio-político, y sin hacer puntualizaciones, destacó que “al contrario de lo que nos muestran algunos ejemplos de la actualidad, separación de funciones no es sinónimo de desentendimiento ni de confrontación. La división de Poderes, vista desde una perspectiva razonable y responsable, implica un deslinde de facultades, un ámbito de decisiones diferente para cada Poder, pero en un contexto de colaboración y acompañamiento”.

En tal sentido, puso de resalto que una de las misiones más importantes de los tribunales es la de “saber mantenerse en la esfera de sus funciones, evitando invadir las atribuidas de los otros poderes”.

“Al Poder Judicial sólo le compete decidir, en causas judiciales concretas, acerca del ajuste de tales medidas al ordenamiento jurídico vigente, y -de modo muy especial- de su ajuste a la Constitución. No sobre el acierto, oportunidad o conveniencia de las leyes o actos de gobierno, como lo tiene reiteradamente dicho nuestro máximo tribunal”, ahondó el presidente de la Corte, trayendo a colación un concepto clásico que cobra particular actualidad en el marco de la judicialización de medidas (o mega medidas) del gobierno nacional; pero que tampoco resulta ajeno al ámbito provincial.

“Es por ello que esa necesaria potestad de controlar a otros poderes del Estado que la Constitución ha otorgado al Poder Judicial, debe ser utilizada con sumo cuidado, sin excesos ni liviandades”, advirtió. Y conectó a eso otra cuestión que tiene especiales connotaciones a la luz de la explícita intención del gobierno provincial de avanzar en una renovación de la integración del Alto Tribunal, y que era materia de expectativa frente al discurso: “Más aún, con el fin de preservar tan delicada misión, la ley máxima de nuestra Provincia estipula expresamente las garantías de inamovilidad e intangibilidad de los Magistrados en el ejercicio de sus funciones, en tanto conserven su idoneidad física, intelectual y moral (art. 88 de la Constitución Provincial); como así también, los mecanismos a seguir en tanto las condiciones exigidas desaparezcan”, consignó, sin más alusiones al respecto.

En todo caso, aprovechó el marco de referencia de la relación entre poderes y el rol del Poder Judicial en la pacificación de la sociedad para “hacer público una vez más mi más enérgico repudio a las amenazas sufridas por nuestro señor Gobernador, y que se suman a similares situaciones de violencia dirigidas contra Jueces y Fiscales de este Poder Judicial”.
Vacantes

Como es tradicional en estas ocasiones, el presidente de la Corte puso sobre el tapete también el siempre delicado tema de las vacantes judiciales, que la actualidad se traducen, según su descripción, en “juzgados que deben ser suplidos por otros jueces -que incluso, a veces, no son de la misma sede judicial; cámaras de apelación que deben integrarse con magistrados de diferentes fueros; demoras y trastornos en trámites y decisiones”.

Gutiérrez concedió que “en los últimos años, y a través del Consejo de la Magistratura, se ha venido exhibiendo una mayor eficiencia” en los procesos de cobertura de cargos. De todos modos, hizo notar que “en este último tiempo se ha producido la renovación de más del 95% de la Magistratura toda, como así también la conformación en su integridad del Ministerio Público de la Acusación y del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal.

“Por consiguiente y tratándose de una materia naturalmente dinámica, el número de órganos en funcionamiento que se encuentran vacantes a la fecha, sigue siendo apreciable. En efecto: basta para así afirmarlo que, sobre un total de 374 cargos de jueces en toda la Provincia, 54 se encuentran vacantes a la fecha. De ellos, sólo 1 está cubierto con juez subrogante; los restantes 53, permanecen sin ningún tipo de cobertura”, añadió.

Exhortación

Luego de repasar los avances del Poder Judicial en materia edilicia, de informatización y digitalización de expedientes y trámites, capacitación y mediación, el presidente de la Corte enfatizó el compromiso con “la realidad que nos circunda” y exhortó a los integrantes de los tres poderes a ir por ese camino.

“Hoy más que nunca, el rol de la Justicia ha ocupado un papel fundamental en la escena social, ya sea por desperfectos institucionales achacables al Estado todo, como por una creciente democratización de la Justicia. Es por ello que se nos plantean nuevas responsabilidades de cara al mantenimiento de la gobernabilidad de los Estados y del respeto hacia las Instituciones.

En este camino, todos mis colegas y quien les habla seguiremos honrando con seriedad y responsabilidad el rol que estamos llamados a cumplir, e invito a todos los sectores de la sociedad: organismos públicos, privados, y quienes en definitiva debemos brindar nuestros mejores y mayores esfuerzos para el bienestar de la comunidad, a transitar por la misma senda, con la vocación de trabajo que nos ha caracterizado desde siempre”, concluyó.

Fuente: El Litoral