Fue radicada en sede policial por un grupo de madres de Cañada Ombú. Esta mañana acudieron a la Unidad Fiscal Vera para reclamar por el caso y por la implementación de una medida perimetral.
Dos madres de alumnos de una escuela de Cañada Ombú denunciaron en sede policial a una docente de la escuela de esa localidad por supuesto acoso sexual en perjuicio de sus hijos.
Una de estas mujeres relató ante el sumariante de turno que el día 27 de noviembre de este año, siendo la 7 de la mañana, su hijo de 14 años le manifestó que no quería ir a la escuela. Y agregó que cuando le preguntó cuál era el motivo, le respondió que “la seño lo manoseaba por encima de la ropa, del hombro hasta la panza, y él se levanta y se va al patio de dicho establecimiento”.
Además, dijo que el chico le comentó que lo invitaba a “ir a su casa a tomar mate”, y que “a otro compañero le puso la cola en la cara” y que eso “le dio mucha vergüenza”.
En el acta de la denuncia, con la angustia propia del momento, esta madre confirmó su voluntad de instar la acción penal contra la sindicada, y añadió que los chicos aseguraron que la maestra “hablaba de sus intimidades” delante de ellos.
En realidad, son un total de ocho las madres que impulsan acciones judiciales contra la docente, pero solo dos pudieron presentar la denuncia.
En la mañana de hoy, se constituyeron en Fiscalía de Vera para reclamar por el caso que las mantiene preocupadas y en alerta, al igual que a su hijos.
“Vinimos acá, nos tienen como que sí, que está todo en curso, pero hace más de tres semanas que está pasando esto. Y la docente sigue yendo a la escuela, los chicos van al comedor. Necesitamos una respuesta urgente”, manifestaron a InfoVera.
En el mismo tono, expresaron que “en el Ministerio de Educación no tenían conocimiento de esto, no tenían nada, ninguna denuncia. ¡Pedimos hace cuánto una perimetral, todavía no llegó esa perimetral! Los chicos siguen yendo a la escuela porque van al comedor, la docente sigue trabajando ahí. Y bueno, necesitamos respuesta. Es llamativo que ya tres semanas después no tengamos respuesta”
Más adelante, señalaron que el fiscal (Leandro Benegas, que las atendió) les dijo que va investigar el hecho y que “mañana recién le llega a Fiscalía el legajo”. “Ya pasaron tres semanas que tendría que estar ahí”, sentenciaron.
Reunión con la supervisora
Tras calificar al caso como “grave”, alertaron que “la docente sigue trabajando”. “Tuvimos una reunión por Zoom con la supervisora y la supervisora dijo que no la podían sacar del cargo, que ella tenía que seguir trabajando. Entonces le dijimos que los chicos no iban a tener el acto (de fin de año) porque no queríamos que ella les siga dando clase o que esté ahí en la escuela. Rápido nos dieron la respuesta que sí, que bueno, que los chicos iban a tener su acto. Rápido buscaron la ley para que ella quede en su casa. Pero porque nosotros nos pusimos como mamás firmes que si no, no íbamos a mandar a los chicos a la escuela”.
En la descripción de lo que fue pasando, llegaron al día en que se reunieron con el director del establecimiento, encuentro en el cual “la docente nos agredió a nosotros como papás delante de los chicos, nos agredió, nos dijo que tenía el apoyo de la supervisora, del gremio, que tenía un abogado, un montón de cosas delante de los chicos”.
En esa línea de tiempo, trajeron al presente que “después hubo otro problema. Fuimos a hacer la denuncia los ocho papás y, bueno, el policía ahí a cargo tampoco nos quiso tomar la denuncia, solamente le tomó a estas dos mamás, a las otras a ninguna. Eso es lo que el fiscal decía, que a todas nos tendría que haber tomado la denuncia y no las tomó. Por eso figuran solamente dos denuncias y no ocho”.
Enfermos y descompuestos
Sobre ese punto, aseveraron que el resto de las madres también acompañan las denuncias contra la maestra por supuesto maltrato psicológico y verbal que “hacía que los chicos se enfermaban y se descomponían porque no querían ir a la escuela por esta razón, que les trataba mal.
“Los chicos -ocho en total- lo único que quieren es no ver a esa persona. Les afecta mucho en el tema porque van al comedor y ella está como cumpliendo horario ahí en la escuela y se la cruzan”.
En diálogo con este portal, apuntaron que “los incentivaba a tener relaciones” y que les hablaba de sus virtudes amatorias.
Por último, insistieron en pedir que se dicte una medida restrictiva perimetral y exigieron que la justicia acelere sus tiempos para dar respuesta dado que está en riesgo la salud física y mental de sus hijos.