Juan Alberto Zalazar es periodista, vive en Margarita y fue víctima de un accidente de tránsito.
En diálgo con InfoVera contó el trance que debió vivir tras ser colisionado por una camioneta de la policía de Margarita.
Juan es comunicador social, no tiene trabajo fijo y la pelea todos los días para vivir. Además de la profesión de comunicar noticias y la locución, también trabaja de mozo para “parar la olla”.
El domingo 14 de mayo lo chocó una camioneta de la policía de la Comisaría 4ta. de Margarita en la zona de la Ruta 87 S, que es objeto de mejoras con ripio.
“Estoy internado todavía. Calculo me dan el alta el jueves. El martes me operaron, me hicieron cirugía en la muñeca. Esto ocurrió el domingo 14 del mes pasado. Yo tipo 9 salgo de mi casa porque hago bici los fines de semana. Y bajando, pasando la ruta, a media cuadra miro para atrás, porque veo que a la rueda adelante le falta un poco de aire, quería volver a la estación de servicio a ponerle aire, y miro para atrás y lo veo como a treinta metros, veo un bulto negro y azul. No alcanzo a doblar el manubrio de la bicicleta, que me levantan dos metros para arriba”.
En su relató recordó que sintió “todo el golpe, me arrastra la bicicleta y caigo del otro lado del cordón. Y caigo con la espalda y el casco en en el ripio, el casco está golpeado, porque si no hubiese tenido el casco de la bici, digamos, me rompe la cabeza, sin exagerar, sin mentirte, esto fue así”
En el accidente vio comprometidos “la parte izquierda, desde el tobillo, rodilla, la gamba y toda la cola y la mano la mano izquierda. Toda esa parte fue golpeada. Me levanto y le digo ‘no podés venir tan fuerte’. Y bueno, me llevan por delante, me levantan y le digo que me lleven al Hospital. De ahí me hicieron una una radiografía en Vera, me trasladaron a Vera. Cuando volví a Margarita me buscaron y me llevaron a mi casa, pero después al otro día me quise comunicar y me bloquearon”. “No pensaba hacerle denuncia ni nada por el estilo, o sea, no, no quiero hacer, no quería hacer nada”, agregó.
“Y de ahí no tuve más contacto ni con la policía -prosiguió-, ni siquiera pasaron por mi casa a golpear la puerta a preguntar cómo estaban. Eso es lo que más bronca me dio, eso es lo que más bronca ya tengo. Pero bueno, el martes a la mañana en Hospital de Reconquista, y a las diez y media salí de de de cirugía y todo bien, gracias a Dios”.
Indignado por la falta de consideración demostrada, Juan lamentó que “ni siquiera pasaron por mi casa a preguntar cómo estaba, o si necesitaba algo, (nadie se comunicó) estoy solo, sin trabajo, no tengo un sueldo seguro, vivo y como de lo que hago y si no trabajo no como.. y por lo sucedido no estoy trabajando”.
Para finalizar, fustigó que “quienes están para cuidarnos se hacen los desentendidos”.