La audiencia imputativa tuvo lugar en el mediodía del martes en la Oficina de Gestión Judicial de Vera.
En el mediodía del antes, J. C. fue imputado por el fiscal Valentín Hereñú por dos hechos que, presuntamente, tuvieron como víctima a su pareja, una joven mujer de profesión bombera zapadora de Vera.
El primero de los ilícitos endilgados a este sujeto ocurrió el pasado domingo 8 de enero cuando “cortó a su pareja”, que terminó hospitalizada, y el otro sucedíó en julio del año pasado en Garabato en el cual le pegó y la amenazó, de acuerdo a la acusación presentado por el fiscal del caso.
La calificación legal atribuida a la conducta de J. C. por el representante de la Unidad Fiscal vera fue: lesiones dolosas, agravadas por el contexto de violencia de género y por el vínculo, y amenazas simples.
El encartado quedó en libertad con medidas alternativas a la prisión preventiva, dentro de las cuales se contempló la obligación de someterse a un tratamiento psicológico y la prohibición de tener contacto y de acercarse a la víctima, la obligación de colaborar económicamente para el sostenimiento de un alquiler para la pretensa víctima, más la prohibición de usar armas y de ingerir medidas alcohólicas y estupefacientes.
Fuentes del caso indicaron a InfoVera que en la investigación se observó un “sostenido contexto de violencia de género” que se ha manifestado a lo largo de toda la relación de pareja, con una víctima que se “encuentra sometida a un círculo de violencia muy marcado”, con “indicadores muy claros de ese sometimiento”, y una “clara actitud de dominación, de celos y de control” por parte del apuntado como victimario.