El diputado de Juntos por el Cambio, Maximiliano Pullaro, volvió a analizar la deuda de Nación y agregó un dato más. “Perotti firmó un acuerdo con un ministro renunciado, con bonos por menor valor y 3 días después valen menos de lo que aceptó. Hizo todo mal”, señaló.
El acuerdo que Perotti firmó con Nación por la deuda histórica, sigue agregando capítulos. Podría decirse que un ministro renunciado rubricó con su firma un documento que perjudica a la provincia de Santa Fe, según manifiesta Pullaro. “El viernes decíamos que el Gobernador había hecho un mal acuerdo con el Estado Nacional por su contenido. Aceptó bonos tomándolos a un valor mayor de lo que realmente valen implicando una concesión de una quita y en el mismo momento le compromete al Gobierno Nacional pagar a la AFIP mediante un descuento en la coparticipación de la Provincia de unos $8.000 millones anuales a perpetuidad”, expresó.
Desde los equipos técnicos del actual diputado expresan que el momento de la firma fue el menos adecuado. Los anteriores gobernadores aguantaron a pie firme para proteger los intereses de la provincia. “La oportunidad en que se cerró ese acuerdo no pudo ser peor. En la desesperación por lograr cierto protagonismo, Perotti cierra un acuerdo con un ministro que se estaba yendo, 72 horas antes de que se desate una crisis más en la economía”, señalan.
¿Si tomó bonos a $100 que valían $60 no se dio cuenta que algo sucedía? ¿Que eso indicaba que había algo inminente? Se preguntan.
La respuesta para Pullaro es simple. “Es tal la desesperación por presentar algún logro en esta gestión fracasada que ni siquiera pensaron que estaban perjudicando a todos los santafesinos. La Nación nos debía 600 mil millones, nos dieron papeles mojados y encima ahora tenemos que pagarles nosotros a ellos”, señaló.
“Hoy la Provincia ya firmó un acuerdo, dando por cobrado el crédito con el Estado Nacional por fallos de la Corte Suprema y pasa a ser un mero bonista librado a la suerte de los papeles que le dio un ministro antes de desocupar su escritorio. El nulo sentido de la oportunidad de Perotti es tan malo como toda su gestión”.