Los comunicó la empresa esta tarde. Los socios aceptaron una manifestación de interés de tres compañías. Se trata de ACA, Molinos Agro y Viterra Argentina.
La posibilidad de que lo que queda del Grupo Vicentin sea vendido, un fantasma que se agitó desde el primer momento en que la agroexportadora declaró el default privado más grande de la historia, cobró hoy visos de realidad.
A través de un comunicado, la empresa dio cuenta que un grupo mayoritario de accionistas de Vicentin ha aceptado una “manifestación de interés no vinculante presentada por parte tres compañías, de extensa trayectoria en la industria, que tienen la vocación de evaluar la posibilidad de adquirir una participación mayoritaria del capital de la sociedad”, a través de la modalidad de capitalización.
Alternativamente, explicó el parte, “los interesados podrían evaluar la utilización de los activos de la sociedad bajo la modalidad de fazón, complementada con acuerdos de mediano plazo que otorguen el derecho a ingresar al capital social de la sociedad”.
Más adelante, los accionistas refirieron que por iniciativa de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Molinos Agro S.A. y Viterra Argentina S.A. (antes denominada Oleaginosa Moreno Hnos. S.A.), estas tres compañías expusieron, conjuntamente, su “interés de manera no vinculante para participar en este proceso de análisis de una potencial transacción”.
Asimismo, se encargaron de resaltar que las tres partes poseen una reconocida trayectoria en el mercado en el que se desempeña Vicentin y, aun teniendo distintos orígenes, detentan un “compromiso de larguísima data” con el desarrollo argentino: ACA es un referente del cooperativismo argentino desde 1922, Molinos Agro es, con 115 años de historia, una de las empresas nacionales más relevantes del sector agroexportador, y Viterra Argentina, que forma parte del grupo internacional Viterra, es referente en ese mismo mercado realizando actividades en Argentina desde hace 40 años.
A partir de la aceptación de la manifestación de interés por parte de la masa societaria de Vicentin, los interesados llevarán a cabo un proceso de auditoría (due diligence) de la sociedad, finalizado el cual, podrán “presentar una oferta vinculante que seguirá los pasos previstos en el marco del concurso”, detallaron.
En cuanto a los alcances de la manifestación de interés, indicaron que prevé que, de prosperar la transacción, los interesados “adquirirán una participación que en forma conjunta les otorgue todos los derechos políticos necesarios para adoptar las decisiones que hagan al giro ordinario y extraordinario de la sociedad”, procurando que la sumatoria de sus participaciones no sea superior al 90 por ciento del total del capital y votos de la sociedad.
En tanto, como alternativa a la capitalización de la sociedad, los interesados analizarán también la posibilidad de “efectuar una contratación, de mediano o largo plazo, de la capacidad de industrialización a fazón de las diferentes plantas de la sociedad, a través de un esquema que posibilite el mantenimiento del giro de la sociedad y el cumplimiento de la propuesta concursal aprobada”, complementada con acuerdos de mediano plazo que otorguen la posibilidad de ingresar a su capital social.
Paralelamente, Vicentin y sus accionistas dejaron en claro que analizarán las condiciones de una propuesta de “reestructuración sustentable” para ser presentada en el marco de su concurso preventivo. En cualquier caso, los accionistas de Vicentin de comprometieron a asumir la postura de “no realizar retiros de fondos de la sociedad, hasta tanto se hubieran saldado las deudas en el marco de dicho concurso preventivo”.
Por último, expusieron varias cláusulas presentes en la negociación, tales como que “sin perjuicio de la presentación por parte de las tres firmas interesadas de la referida manifestación de interés, que no requiere exclusividad alguna, ni de su aceptación por parte de los accionistas de Vicentin, no puede asegurarse que, finalmente, los potenciales compradores presentarán efectivamente una oferta vinculante”. Ni tampoco que, en dicho supuesto, los accionistas de Vicentin “vayan a aceptarla”.
En idéntica línea, señalaron que nada garantiza que la propuesta a ser presentada por la sociedad a sus acreedores, en el marco de su proceso concursal, “vaya a reunir las aprobaciones legalmente requeridas, ni que vaya a ser homologada judicialmente en forma firme y definitiva”.