La ciudad volvió a convertirse en un gigantesco lago tras la lluvia. Ya había ocurrido lo mismo la semana pasada con solo 30 mm caídos. Sumemos Esfuerzos denunció que solo se ejecutó el 15 por ciento de lo presupuestado para desagües pluviales.
La última lluvia volvió a exponer, crudamente, la falta de obras que faciliten el escurrimiento de los excesos pluviales en el ámbito urbano. Las calles de Vera se colmaron de agua de lluvia, y el drenaje demoró más de necesario.
En ese contexto, los vecinos debieron arreglárselas por sí solos para realizar zanjas que destraben el agua acumulada y el municipio solo atinó a recomendar la no circulación de vehículos para evitar el oleaje y que eso afecte a las viviendas.
Desde el bloque Sumemos Esfuerzos revelaron una dato llamativo: “Durante el 2020 se presupuestaron $5.443.585,11 millones para desagües pluviales pero solo se ejecutaron $848.708,27 o sea solo un 15,59% de lo presupuestado”.
Desde todo punto de vista, una grave subejecución de partidas previstas por presupuesto que habla a las claras de la casi nula importancia que la gestión Mitre le da a esta problemática.
Llovió menos de 30 mm pero igual dio para andar en piragua en la zona céntrica de Vera
El sector de la oposición compuesto por los ediles Barbona y Tedini puso de relieve otro dato preocupante: “Para el año 2021 el presupuesto para desagües pluviales es de $1.391.061,60, lo que significa que cayó un 74,45% respecto del año anterior”.
En ese sentido, señalaron que “las consecuencias están a la vista. Las obras de mantenimiento y fortalecimiento del sistema de los desagües pluviales en Vera deben ser prioridad”.
Por último y haciendo referencia a lo que fue la aprobación en tiempo récord del presupuesto municipal 2021 por parte del Concejo, sostuvieron: “Por esta razón es importante discutir y analizar con tiempo y en profundidad los presupuestos anuales del municipio porque los números luego lo padecemos con aciertos o errores todos los ciudadanos”.
Las fotos de calles anegadas es ya una postal recurrente de la ciudad de Vera. Apenas iniciada su gestión, la intendente Mitre debió afrontar una lluvia considerable que complicó seriamente a la ciudad. Un año después, nada cambió. No solo que la partida para desagües se redujo osntensiblemente, sino que tampoco se sabe de gestiones ante el gobierno provincial para concretar obras hídricas que traigan solución a este tipo de fenómenos que, una y otra vez, afectan la propiedad y la calidad de vida de miles de verenes.