Cada 8 de octubre se celebra para visualizar el trastorno de origen neurobiológico que afecta a un 10% de la población mundial.
Hoy, 8 de octubre de 2020, se celebra el día internacional de la Dislexia para visualizar esta dificultad poco conocida y a la que se enfrenta un 10% de la población mundial.
La dislexia es “un trastorno del aprendizaje de la lectoescritura, de carácter persistente y específico y cuyo origen parece derivar de una alteración del neurodesarrollo”, explican desde Disfam -entidad constituida por familias con hijos con dislexia, adultos disléxicos y profesionales-.
En otras palabras, “se trata de un trastorno de origen neurobiológico y hereditario que dificulta a la hora de aprender a leer en forma fluida, exacta y automatizada”, detalló María Arabetti, presidenta Disfam Argentina. Y añadió que “trae grandes consecuencias emocionales si no es tratada y acompañada tanto en el ámbito familiar y escolar, como de la salud”.
No se trata solo de una dificultad en la lectura o escritura, sino que también influye en la comprensión, memoria a corto plazo y en las nociones espacio-temporales.
La neuropsicóloga, Carla A. Carvalho Gómez, en una nota para la ABC comentó que los problemas más frecuentes en las personas con este trastorno son: el fracaso escolar, episodios de estrés y ansiedad, dificultades lectoras e incluso sentimientos de inferioridad y baja autoestima.
Y añadió que “es esencial que profesionales sanitarios y educativos se comuniquen y coordinen tanto en el proceso de evaluación como en el proceso de intervención con el fin de lograr la máxima calidad de vida para pacientes y familias”.
En Argentina contamos con la Ley 27306 que garantiza el derecho a la educación de niños, adolescentes y adultos con dislexia y otras dificultades específicas de aprendizajes.