
Se trata de Edson Da Silva, oriundo de Brasil y con domicilio en Avellaneda, y de Matías Ezequiel Martínez. La justicia federal los halló culpables del delito de transporte de estupefacientes.
El Juzgado Federal de Reconquista, a cargo del doctor Aldo Mario Alurralde, dictó condena firme contra Edson Da Silva, ciudadano brasileño con domicilio en Avellaneda, y Matías Ezequiel Martínez, en el marco de un procedimiento abreviado por transporte de estupefacientes.
El hecho ocurrió el 21 de septiembre pasado, durante un control de Gendarmería Nacional sobre el kilómetro 797 de la Ruta Nacional N.º 11, en jurisdicción del paraje El Timbó. En ese operativo, los efectivos detuvieron una camioneta en la que se trasladaban ambos imputados y secuestraron 15 kilos con 990 gramos de marihuana, distribuidos en dos bolsas de gran tamaño.
Tras aceptar su responsabilidad penal, la calificación legal del hecho y con la asistencia de sus abogados defensores, se arribó a un acuerdo con la Fiscalía Federal, que fue homologado por el magistrado.
Como resultado, Edson Da Silva fue condenado como partícipe necesario del delito de transporte de estupefacientes a la pena de 4 años y 6 meses de prisión de cumplimiento efectivo, además de una multa de 45 unidades fijas. En tanto, Matías Ezequiel Martínez fue condenado como autor del mismo delito a 4 años y 11 meses de prisión efectiva, más una multa de 60 unidades fijas.
La sentencia también dispuso el comiso y la destrucción de la droga secuestrada. Al haber sido consentida por todas las partes, la condena quedó firme, sin posibilidad de apelación.
El juez Alurralde destacó la celeridad del proceso, subrayando que entre el procedimiento y la condena transcurrieron menos de tres meses, lo que atribuyó a la implementación del nuevo Código Procesal Penal Federal y al sistema de oralidad, vigente en la jurisdicción desde el 1 de marzo de este año.
Asimismo, resaltó la importancia de los controles en rutas nacionales, señalando que el transporte es uno de los puntos más vulnerables del narcotráfico, y que interceptarlo permite secuestrar grandes cantidades de droga en procedimientos inmediatos. “Si se frena el transporte, se frena el grifo por donde ingresa la droga”, afirmó.





























