Avioneta narco en San Justo: comenzó el juicio al “Pulga” Casco y Lorena Melgarejo

COMPARTIR

La pareja se mantuvo prófuga durante un año y medio, luego de que en febrero de 2020 apareciera en un campo de San Justo una aeronave que, según la acusación, trasladaba droga desde Paraguay.

El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santa Fe comenzó a juzgar al “Pulga” Casco y a su pareja por la causa que inició con la aparición de una avioneta narco en un campo de Naré (departamento San Justo) en febrero de 2020. El debate, a cargo de los Jueces Germán Sutter Schneider, Luciano Homero Lauría y José María Escobar Cello, inició este jueves.

La acusación promovida por el Fiscal General Martín Suárez Faisal contra Claudio Andrés “Pulga” Casco (48) y Lorena Guadalupe Melgarejo (46) es por los delitos de “organización del tráfico de estupefacientes y transporte de estupefacientes, agravados por la participación de tres o más personas”. A esto se le suma el “lavado de activos”, que involucra también a Luis Ángel Bergallo hijo (34), y el “uso ilegal del DNI perteneciente a otra persona”, delito atribuido únicamente a Casco.

Las defensas están a cargo de los abogados particulares Hilda América Knaeblein -por el “Pulga”-, Sebastián Gervasoni -por Melgarejo- y María de los Ángeles Celada -por Bergallo-. El matrimonio participa del juicio de manera remota, desde el Penal en el que se encuentran desde su captura en julio de 2022 en Chaco, mientras que Bergallo acude de forma presencial.

Tanto el “Pulga” Casco como Melgarejo participan del juicio de forma remota, desde su lugar de detención.

Avioneta narco

Casco y Melgarejo están acusados de haber organizado la llegada a Santa Fe de un cargamento de estupefacientes proveniente de Paraguay. El mismo fue trasladado en una avioneta, que no logró llegar a destino, estrellándose en un campo de Naré el 22 de febrero de 2020.

Tras este imprevisto, el matrimonio habría trasladado el cargamento, con colaboración de otros dos hombres. Utilizando dos vehículos, un Fiat Palio azul y un Ford Focus rojo, movieron las drogas desde esa zona rural hasta dos inmuebles de la ciudad de Santa Fe.

Luego, el matrimonio se dio a la fuga, abandonando su hogar y dejando a cargo de sus tres hijos a la madre de Melgarejo. Mantuvieron comunicaciones con ella, un hermano de Casco y dos persona más, instruyéndolos acerca de la crianza de los niños y señalándoles hacia qué inmuebles trasladarlos.

DNI trucho y lavado de dinero

La acusación fiscal también señala que tanto Casco como Melgarejo organizaron el comercio de estupefacientes en la capital provincial por tiempo indeterminado, hasta su detención en julio del año pasado en un hotel de Chaco. Para hospedarse allí, el “Pulga” utilizó el DNI de Cristian “Oreja” Torres, detenido en 2021 por el transporte de cocaína desde Santa Fe a la Patagonia. Según señaló el primer testigo en declarar en el juicio, un comisario que participó del operativo en el que se logró localizar y detener al matrimonio, el “Pulga” le pagó el abogado al “Oreja”.

La acusación restante, el lavado de activos provenientes del narcotráfico, involucra tanto al matrimonio como a Bergallo -hijo del “Coco” Bergallo, un jefe narco que en 2017 fue precandidato a concejal-. En concreto, la fiscalía señaló que el 30 de octubre de 2020 Bergallo adquirió un Renault Fluence perteneciente a la pareja, conociendo su procedencia delictiva.

Las declaraciones

Previo a comenzar a escuchar a los testigos, el tribunal dio lugar a las declaraciones indagatorias en juicio. El “Pulga” Casco decidió no hablar, comportamiento que mantuvo desde el momento de su detención. Bergallo hijo sí declaró, limitándose a decir que es inocente y que “yo no compré el auto, lo compró mi esposa”.

Melgarejo no declaró, pero como sí lo hizo durante el proceso, se dio lectura a lo que manifestó en julio de 2022. En esa oportunidad, señaló ser víctima de violencia de género, dijo que fue obligada a abandonar a sus hijos y profugarse junto a Casco y que ella no había intervenido en el traslado del cargamento de la avioneta: “Ese día se fue con dos, llegó de noche y me dijo ‘nos tenemos que ir’”.

Además, declaró que Casco “me mandaba a hacer las cosas y yo tenía que obedecer”, y dijo tener miedo tanto por ella como por sus hijos.

El Litoral