Fue en la siesta de este martes.
Pasado el mediodí, un bebé de un año ingresó sin signos vitales al Hospital de Garabato.
La policía acudió al lugar y pudo establecer que el lactante, en circunstancias que se encontraba en su domicilio del paraje Km 302 cayó en una cuneta con agua, y pereció ahogado.
Interiorizado del hecho, el fiscal de turno dispuso la entrega del cuerpo del menor a su madre para su sepelio.