En el acto oficial por el 133° aniversario de Vera, la intendenta Paula Mitre ofreció un discurso cargado de sentido histórico, reconocimiento a la comunidad y un llamado a la unidad y al trabajo conjunto, en un contexto social y económico complejo tanto a nivel local como nacional. Pero a su vez, puso el foco en el (des) manejo de las redes sociales como factor de agravios.
En su mensaje, que fue el único del acto central en el Paseo de las Artes, Mitre repasó los orígenes de la ciudad, desde su declaración como comuna en 1894 hasta su reconocimiento como ciudad en 1954, destacando el papel protagónico que jugó la comunidad en épocas difíciles. “Durante estos 133 años, la comunidad de Vera ha debido enfrentar épocas buenas y otras malas, situaciones críticas y adversidades climáticas, momentos en los que afloró la condición solidaria de sus habitantes”, expresó.
La jefa comunal no esquivó la difícil coyuntura actual. Señaló que se vive un tiempo marcado por la intolerancia, la violencia y la crisis económica. En particular, mencionó la baja en la recaudación municipal, producto de la caída de los recursos coparticipables nacionales, y los efectos de la reciente inundación. “Compartimos la inquietud y el malestar de los vecinos. En nuestro caso, esa preocupación se traduce en poder pagar salarios, cumplir con proveedores y asistir a quienes más lo necesitan”, remarcó.
Mitre llamó a actuar con responsabilidad y austeridad, y también cuestionó el uso malintencionado de las redes sociales que, según dijo, “pueden convertirse en fuentes de desinformación y de descargas de mal humor social”.
“Hoy, nos toca enfrentar un tiempo difícil, el mundo y el país están convulsionados; la intolerancia, la violencia, los agravios, afectan nuestras sanas costumbres, y los valores esenciales que garantizan la convivencia pacífica”, analizó.
Y dijo que el caso caso particular de Vera se observa “un preocupante panorama de confrontación, donde se está perdiendo el sentido de la razonabilidad y del respeto, donde se exige la solución inmediata de reclamos de larga data, cuya satisfacción requiere de planificación y de recursos económicos, de los que carece el erario municipal, seriamente condicionado por la baja recaudación por una marcada caída de los ingresos nacionales coparticipables”.
Por otro lado, atribuyó al incremento del costo de vida y de los servicios, la disminución o falta de los ingresos y de trabajo que afectan a numerosos vecinos, y a las consecuencias provocadas por la reciente inundación, la generación “en muchos de un comprensible estado de inquietud y malestar, que se ha canalizado a través de manifestaciones y críticas que no siempre se orientan hacia los verdaderos responsables y hacia los que tienen la llave de las soluciones”.
“En nuestro caso, esa preocupación se genera cuando debemos afrontar el pago puntual del salario a los trabajadores municipales, el pago a proveedores y contratistas, y frente a la necesidad de colaborar con la atención de las crecientes necesidades de numerosos vecinos que se encuentran en una situación de franco desamparo”, refirió.
Al respecto, aseguró que “solo con una administración austera, honesta y cuidadosa de los recursos se pueden atender dichas exigencias y, de hecho, con gestión, con esfuerzo y superando contingencias, lo estamos logrando”.
Más adelante, insistió con que los medios informáticos administrados correctamente sirven para el conocimiento y desarrollo de las personas, pero “también y hay que decirlo, pueden convertirse en aliados para desembocar o descargar el mal humor social, pueden convertirse también en fuentes de desinformación, plagados de comentarios mal intencionados, que pueden confundir a muchos” y generan situaciones que debemos atender desviándonos del eje de nuestras obligaciones.
“Confiamos en que tales expresiones críticas que se realizan en el marco de una campaña política, con el propósito de obtener beneficios personales o partidarios sean la excepción que confirma la regla, y que nada nos aparte del camino que hemos elegido como comunidad, el camino del entendimiento a través del diálogo, el camino del progreso, del desarrollo, con mejoras urbanas y emprendimientos que generen puestos de trabajo, en post de un futuro de paz y oportunidades”, postuló.
Horizonte estratégico: Vera 2030
La intendenta reivindicó el trabajo realizado en el marco del Plan Estratégico Participativo Vera 2030, una hoja de ruta que —dijo— “nació con raíces firmes y un horizonte claro, construida junto a vecinos, instituciones, productores y emprendedores”.
En esa línea, destacó políticas públicas activas como Vera Produce, que impulsa el desarrollo económico local mediante capacitación en oficios, apoyo crediticio, generación de empleo y arraigo. “Estamos cerca de concretar nuestro sueño del área productiva e industrial, que traerá desarrollo, progreso y empleo”, anunció con entusiasmo.
También subrayó el rol del municipio en la organización de la feria aniversario, que en esta ocasión fue pensada con criterio social: los puestos fueron adjudicados sin costo a los emprendedores y artesanos verenses más afectados por la recesión y la inundación, absorbiendo el municipio todos los gastos operativos.
Vera incluye e integra
Mitre reafirmó el compromiso de su gestión con la inclusión y el desarrollo urbano. Mencionó acciones vinculadas a programas sociales como Encontrarnos y Nueva Oportunidad, la recuperación del Cine Teatro Español, las mejoras en el Polideportivo Municipal y la futura pileta pública. En materia de infraestructura, resaltó avances en cloacas, desagües, cordón cuneta, alumbrado, caminos rurales y reconstrucción de puentes, muchas de ellas con financiamiento provincial.
“Vera está cambiando. No de golpe ni de un día para el otro, pero sí con pasos firmes, sostenidos y compartidos. El futuro no es una promesa lejana: es una construcción diaria”, afirmó con convicción.
Llamado a la unidad
Finalmente, Paula Mitre cerró su discurso con un llamado a honrar el legado de generaciones anteriores, apostando a la participación ciudadana y al diálogo. “Sigamos trabajando unidos, con compromiso, con confianza y con la esperanza intacta de ver florecer la ciudad que soñamos. Feliz cumpleaños, mi Vera querida”, concluyó emocionada.
