Ciertamente que las cinco comparsas oficiales de Vera exhiben con esplendor su belleza y color, pero ese despliegue se complementa con otros elementos que también forman parte de la fiesta que se potencia con los aplausos de la multitud bajo una lluvia de nieve en un marco que hace que el carnaval de Vera sea diferente y único, dado que la gente también forma parte de este gigantesco show.
Un espectáculo que comienza con la presencia de una agrupación que desde hace muchos años tiene a su cargo la apertura del corso.
Se trata de “Dale que va”, integrada en su mayoría por personas mayores pertenecientes al Centro de Jubilados y Pensionados Nacionales de Vera, alentados por la arenga permanente del Gringo Frigeri, de quien se apropiaron para convertirlo en su animador exclusivo.
Un aporte más que expresa con alegría que para disfrutar del Carnaval no hay edad ni existen los límites, ya que como sucede con los demás participantes, ellos mismos se diseñan y confeccionan los trajes que lucen con gran orgullo cada noche para recibir el reconocimiento transformado en aplausos a lo largo del corsódromo.
Letyana Press
