El juez federal de Reconquista se refirió al reciente pedido de la Corte de mayor custodia para magistrados nacionales que actúan en la provincial. Además, sostuvo que las peleas políticas constituyen una debilidad frente al narco. Reclamó mayor presencia en las vías terrestres por donde pasa la droga, como la ruta 11. Apoyo a Brilloni.
“Acá lo que interesa no es lo personal, sino la seguridad que la sociedad en su conjunto tiene que experimentar y tiene derecho a acceder a ese valor”, aseguró el juez federal de Reconquista Dr. Aldo Mario Alurralde, en referencia al reciente pedido expreso del Presidente de la Corte para mejorar la custodia de los magistrados federales que actúan en la provincia debido a los hechos y atentados que vienen sufriendo distintas dependencias judiciales y policiales de Rosario.
El funcionario indicó que “entonces, yo creo que el tema implica mayor trabajo y responsabilidad de la judicatura de ser implacable con la cuestión del narcotráfico”.
En diálogo con InfoVera, pidió “dejar de lado todas estas cuestiones que están emparentadas con la política o cuestiones vinculadas a jurisdicciones, en donde uno echa la culpa al otro, donde uno sostiene que no entiende lo que está haciendo el otro, lo que pasa en un lugar o el otro”, en una clara alusión a los cruces políticos entre el gobierno provincial y la Nación por la cuestión de la inseguridad.
“Le puedo asegurar que los narcos sienten lo que pasa y cómo llevar adelante sus negocios”, afirmó el magistrado, e insistió con su postura crítica al respecto: “Esto, en sí, constituye una debilidad en la lucha contra el narcotráfico y en ese sentido hay que superarlas, estar por encima de esas cuestiones. Esto se combate con trabajo y con compromiso, indudablemente”.
“Persona expeditiva”
Respecto del nuevo ministro de Seguridad de la provincia, Claudio Brilloni, dijo conocerlo desde lo funcional porque “ha estado a cargo de Gendarmería en la región Rosario y en ese momento hemos tenido importantes procedimientos en trabajos conjuntos, y bueno ahora le toca desde otra función que es el Ministerio de Seguridad; estimo, en la valoración, que es una persona muy expeditiva, ágil en la toma de decisiones, conoce mucho la problemática, pero tengamos presente que una sola persona, por más excelente que sea en su desempeño, no cambia la realidad, sino que la realidades se cambian por la sociedad en su conjunto”.
El juez federal instó a “apoyarlo, pero no sentarse a esperar el resultado, sino que el resultado se tiene que generar entre todos los actores de la sociedad”, es decir los vecinos, los medios de comunicación y, obviamente, la justicia y las fuerzas de seguridad.
Puerta abierta
Consultado sobre cuándo comenzará a funcionar el nuevo esquema de custodia a jueces federales de la provincia prometido por el Ministerio de Seguridad de la Nación, respondió de forma contundente: “No lo sé, no es lo que más me ocupa y menos me preocupa. Lo que más ocupa es el combate al narcotráfico y sí me interesaría saber cuándo se van a incrementar los controles sobre la ruta 11, que es una de las adyacentes al Paraná y conocida como ‘la ruta de la marihuana’”.
En tal sentido, inquirió a modo demanda: “Cuándo se van a implementar los controles aleatorios, la utilización de escáneres, de perros adiestrados; es decir, todas esas cuestiones que hacen a la logística. En esto coincido cuando se ha dicho que hay que cerrar los pasos de la droga y una de las puertas que continúa siempre abierta es la vía terrestre”.
En conjunto
En final de la entrevista, volvió a abogar por dejar de lado las diferencias entre los responsables de combatir el flagelo de la inseguridad y el narcotráfico: “Cuando tenemos una causa en conjunto con fiscalía, no nos andamos peleando entre uno y otro. Justamente, cuando trabajamos utilizamos todas las fuerzas que tenemos disponibles de prevención, sean provinciales o federales, sin mirar si corresponde a la Nación o a la Provincia, porque el fenómeno del narcotráfico traspasa las cuestiones vinculadas a los límites provinciales y a las fronteras, entonces este es un trabajo conjunto porque los narcotraficantes tampoco observan o ven jurisdicciones, ellos ven negocios y actividades ilícitas, independientemente de a quien le corresponda combatirlos o no”.
